Usamos aceite de cocina día a día, prácticamente, y casi nunca gestionamos bien su reciclaje. Son muchas las personas que, tras usarlo, se limitan a tirarlo por el fregadero, o a guardarlo en envases que posteriormente tiraran a los contenedores tradicionales. Ninguna de estas opciones es viable, puesto que estaríamos causando graves daños al medioambiente y, además, dañando el desagüe y toda la infraestructura de saneamiento en general. Hoy os vamos a enseñar qué es lo que sí se debe hacer con ese aceite usado, además de todas las cosas que debes evitar hacer. ¡Sigue leyendo!
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Lo que SÍ se debe hacer
Lo primero que debes saber, y que es algo que en ocasiones desconocemos, es que el aceite de cocina es totalmente reciclable. El mero hecho de verterlo en un desagüe acaba por generar muchos más residuos, dañar al medioambiente y atascar tanto nuestra tubería como toda la red de alcantarillados a largo plazo. No solo impedimos que se le pueda dar otra vida, sino que, además, estamos poniendo en riesgo el planeta en el que vivimos.
Pero, entonces, ¿qué podemos hacer? La mejor alternativa será siempre la de guardarlo de forma conveniente y llevarlo a un punto limpio, o a algún punto de recogida cercano.
Llevar el aceite a un punto de recogida o punto limpio
Los puntos de recogida o puntos limpios son instalaciones en las que se gestionan todos esos residuos que se consideran especiales por algún motivo. Por ejemplo, pilas, electrodomésticos, aceites… Suele haber varios en cada ciudad, casi siempre ubicados en zonas de fácil acceso para que los usuarios no tengan problemas al llegar hasta ellos. Y con ese sencillo gesto de llevar allí el aceite que ya hemos usado, nos estaremos asegurando de que se le dé el tratamiento adecuado para darle una segunda vida.
Pero ¿cómo se hace? ¡Es muy fácil! En primer lugar, te recomendamos que te acerques al punto limpio que haya en tu ciudad y les preguntes cómo realizan ellos el reciclaje de aceite usado. Mientras que hay algunos que te permiten usar tus propios recipientes para llevar el aceite, hay otros que te los facilitan para así hacer que la recogida sea mucho más homogénea. Nunca se usa la botella inicial en la que venía el aceite, puesto que esta no es apta.
Si ya tienes un recipiente, te señalamos cuáles son los pasos por seguir para que te resulte más sencillo:
- Deja enfriar el aceite hasta que este se encuentre a temperatura ambiente y puedas manejarlo sin problema ni riesgo.
- Tras esto, coge la botella o el recipiente que hayas elegido, que jamás debe ser de vidrio.
- Ayudándote de una malla, podrás introducir poco a poco el aceite, evitando así que entre cualquier tipo de resto de comida.
Cuando tengas tus botellas listas, será tan sencillo como ir con ellas al punto limpio. Allí, los empleados te guiarán, te indicarán cómo proceder para dejar el aceite y se encargarán del resto. ¡Es muy sencillo!
Lo que NO se debe hacer
Ya sabemos lo que podemos hacer con el aceite, pero también es importante recalcar todo eso que debes evitar hacer bajo cualquier circunstancia. Y es que podría dañar tu tubería, el alcantarillado completo y, además, perjudicar al medioambiente.
Tirar el aceite por el fregadero
Una práctica que, desgraciadamente, sigue siendo muy común, es la de verter el aceite directamente por el desagüe del fregadero. Sí, es una solución rápida y fácil, pero tiene graves consecuencia que acabaremos por pagar todos, por desgracia.
Lo primero que notarás a corto plazo es que las tuberías se obstruirán, porque el aceite no funciona como el agua u otros líquidos similares. Acabará quedándose adherido a las paredes, con todos los restos de alimentos que pudiera traer consigo, y eso causará costosas reparaciones.
Una vez en el sistema de alcantarillado, el contaminará el agua y hará que sea mucho más complejo el depurarla posteriormente. Esto no solo causará problemas en la calidad del agua que nosotros tomamos, sino que podría llegar a los mares y a los ríos, y dañar todo el ecosistema acuático. Pudiendo evitar de forma sencilla todos estos problemas, ¡lo mejor es proceder bien!
Tirar el aceite a la basura
¿Qué pasa si nos deshacemos del aceite que ya hemos usado tirándolo a la basura? En ese caso, estaremos contaminando el resto de los residuos y haciendo que tanto su gestión como su reciclaje posterior sea mucho más complicado. Es más, habrá ocasiones en las que no podamos siquiera reciclar todos esos productos.
Por si esto no fuera suficiente, este aceite también puede acabar por filtrarse en el suelo, causando aún más contaminación tanto en el suelo como en las aguas subterráneas.
¿Qué ocurre con el aceite que llevamos a un punto limpio?
Cuando llevamos el aceite usado a un punto limpio, en este pasa por un proceso complejo de reciclado que nos permitirá, posteriormente, darle una segunda vida. Son muchos los usos que se les puede dar; por ejemplo, desde Repsol han apostado por recoger aceite que ya ha sido depurado y trabajar con él. En sus fábricas se dedica a transformarlo en combustible renovable, que posteriormente se puede usar para coches, camiones, barcos e incluso aviones. Gracias a eso, no solo reciclamos ese aceite que ya hemos utilizado, sino que también obtenemos un combustible mucho más respetuoso con el medio ambiente.
Además, también se puede usar para fabricar otro tipo de productos: jabones naturales, lubricantes, biocombustibles… ¡Son muchas las alternativas! Y, para conseguirlo, es tan fácil como recolectar el aceite que ya hemos usado y llevarlo en recipientes a un punto limpio. No nos quita prácticamente nada de tiempo, y nos permite cuidar el medioambiente.
Como habrás visto, son todos esos gestos pequeños y sencillos que llevamos a cabo en nuestro día a día los que marcan la diferencia en lo que a reciclaje se refiere. Y, ya que prácticamente no nos cuesta nada, ¡qué mejor que hacerlo y cuidar el planeta en el que vivimos!
💡 Aprende a reciclar el aceite usado